EL Programa de Atención Integral en Salud (PAIS): Al borde del colapso

Se veía venir...

El Programa de Atención Integral en Salud (PAIS) de la UCR cubre las áreas de salud de los cantones de Montes de Oca, Curridabat y parte de la Unión.

Tal como hemos venido planteando en el SINDEU desde hace mucho tiempo, la errática gestión y negligencia de parte de la Vicerrectora de Acción Social Dra. María Pérez-Yglesias, así como del anterior Director del PAIS, Dr. Mario León Barth, tienen al Programa de Atención Integral en Salud, CCSS-UCR al borde de un inminente cierre. La diferencia radica en que en esta ocasión y por vez primera se reconoce en documentos oficiales la insostenibilidad financiera del Programa. Veamos los detalles.

Desde hace casi cuatro años la administración de la UCR no firma un nuevo convenio con la CCSS para el sostenimiento del PAIS. En su lugar la Dra. María Pérez-Yglesias con la colaboración del Dr. León suscribieron una serie de prórrogas parciales al convenio ya vencido, sin realizar las debidas gestiones administrativas de coordinación interinstitucional ni los estudios técnicos necesarios para actualizar el costo de los servicios de salud que se ofrecían a través del PAIS. Como parte de estas prórrogas la Universidad se comprometió a asumir la diferencia económica entre el financiamiento ofrecido por la CCSS y el costo real de los servicios, lo cual trajo una serie de consecuencias ruinosas, como el estancamiento en la inversión en infraestructura y equipamiento de los EBAIS y principalmente el crecimiento de un enorme déficit para la UCR. Este déficit es calculado en casi 5 000 millones de colones, lo cual además generó malestar e inconformidad en una parte de la comunidad universitaria, llegándose a cuestionar la pertinencia de continuar sosteniendo el PAIS.

La Rectora Yamileth González firma el acta de defunción...

Sin embargo, la situación se complica aún más a raíz de la firma de la reciente prórroga al convenio con la CCSS. En el oficio R-1534-2012, con fecha de 19 de marzo de 2012, la Rectora Dra.Yamileth González señala que se acuerda una última extensión que va del 01 de abril al 31 de diciembre del 2012. Define asimismo una serie de plazos para que la CCSS se comprometa a reajustar de manera retroactiva el costo de los servicios una vez que se firme el convenio, esto significa que se le solicita a la CCSS que reembolse la diferencia entre el costo de los servicios mientras estos funcionan con prórroga y el costo real de los mismos una vez que este sea claramente definido. Esta postura consideramos que fue la que debió asumir hace varios años la Vicerrectora María Pérez-Yglesias, responsable del actual desequilibrio financiero.

Sin embargo, la señora Rectora agrega un preocupante párrafo que transcribimos a continuación:

“En caso de que la CCSS no cumpla con el cronograma establecido, tendrá plazo de seis meses, a partir del 01 de julio y hasta el 31 de diciembre de 2012, para que cuente con el tiempo suficiente a efectos de que retome la prestación de los servicios y tome las medidas pertinentes para no afectar la continuidad de los servicios en las áreas de salud indicadas”. (Resaltado nuestro)

La posición es clara, si la CCSS no paga retroactivamente parte del déficit y no actualiza el costo de los servicios, la UCR no asumirá más la prestación de los servicios. Nuestra preocupación radica en lo siguiente: ¿Podrá una CCSS al borde de la bancarrota asumir la deuda con la Universidad? Particularmente lo dudamos, y consideramos que esta tardía reacción de la Administración lo que hace es ponerle fecha definitiva a la defunción del PAIS. Esto nos plantea una preocupación adicional: ¿Qué les espera a los más de cuatrocientos funcionarios y funcionarias del PAIS, en planilla de la UCR?

¿Desempleo o Solución a la Española?

La situación plantea una enorme incertidumbre para las y los trabajadores del PAIS. En el horizonte cercano se aprecian dos opciones: o el desempleo (ya que nada garantiza que la CCSS o la empresa que asuma las Áreas de Salud contrate precisamente al mismo personal) o bien conservar el empleo de manera degradada.

De manera reciente en oficio PAIS-DG-654-011, con fecha del 12 de diciembre de 2011, el actual Director General del PAIS Dr. Mauricio Vargas señala el actual estado técnico y financiero del Programa identificando los problemas de gestión causados por el antiguo director Dr. Mario León y sobre los cuales según sus palabras “la CCSS no llamó la atención dejando de actuar como un buen padre de familia”. Entre las causas del actual déficit señaladas por el Dr. Vargas, llama la atención uno en particular que transcribimos textualmente:

“Aplicación sin restricciones, de la política salarial de la Universidad de Costa Rica a una organización como el PAIS que presta servicios de salud”. (Resaltado nuestro)

A pesar de denunciar las irregularidades en torno a la gestión del Programa y de las condiciones en que se han negociado sus prórrogas, el Dr. Vargas fue incapaz de señalar concretamente a los responsables de la debacle financiera (el Dr. León y la Dra. Pérez-Yglesias), sino que señala como culpables a los y las funcionarias de PAIS, quienes inicialmente no fueron reconocidos como funcionarios y funcionarias de la UCR (este reconocimiento lo lograron a partir de una importante lucha). En este punto el planteamiento es que, al parecer, los costosos salarios de las y los trabajadores son una de las causas de la crisis del Programa.

Este argumento, guarda enormes similitudes con la situación acontecida en España, país europeo severamente golpeado por la crisis económica, en donde el gobierno y los empresarios después de responsabilizar al costo de los salarios por la crisis, han procedido a reducirlos y contratar a los y las trabajadoras en condiciones precarias. Actualmente todo parece indicar que de no ser despedidos, las y los funcionarios del PAIS, dejarían de gozar de las condiciones bajo las cuales se contrata en la UCR. La otra posibilidad es que, una vez despedidos los compañeros y compañeras, los EBAIS respectivos sean entregados en concesión a alguna empresa privada que lucra a costa de la salud pública, como ya sucede en otras áreas con ASEMECO, subsidiaria del Hospital Clínica Bíblica, o bajo la modalidad de cooperativas privadas, siendo que no por casualidad Mauricio Vargas, en el pasado fue director de una cooperativa de ese tipo que vende servicios a la Caja: COOPESALUD

Finalmente... de testigo a sospechoso...

Finalmente queremos agregar algo más con respecto al Dr. Vargas. El reciente escándalo con respecto a su morosidad con la CCSS, motivo por el cual debió, ante la presión, renunciar a la Gerencia Médica de dicha institución, nos plantea varios problemas. El Dr. Vargas fue uno de los que participó en las consultorías millonarias de un grupo de auspiciado por Ingeniería Industrial y contratado para la reingeniería de recursos humanos en el Ministerio de Salud, bajo coordenadas neoliberales. Luego, poco después, pasó a ser Viceministro de Salud en la administración de Oscar Aras. De modo que no es la primera vez que Vargas “se cambia de camiseta”, esto es: que funge alternativamente bajo el alero de la UCR y luego en la contraparte. Por ello, hoy es preocupante que el Dr. Vargas esté negociando un convenio con la CCCSS como director del PAIS, de repente pase a ser Gerente Médico de la CCCS, después renuncie por los cuestionamientos y regrese luego sin más a la Dirección del PAS, es decir, en poco tiempo es parte y contraparte en este conflicto y negociación entre la CCSS y la UCR. Esto plantea un serio conflicto de intereses y pérdida de confianza. Asimismo preguntamos: ¿con qué moral el Dr. Vargas puede defender la seguridad social, si al ser nombrado Gerente Médico fugazmente, se destapó su morosidad con respecto a las cuotas con esa Institución? Si a eso sumamos que el Dr. Mauricio Vargas, como ya indicamos, es miembro fundador de una de las empresas privadas a las cuales han sido concesionadas Áreas de Salud, mecanismo por el cual se ha venido desarrollando la privatización de la atención de la salud en nuestro país, entonces es aún más cuestionable que ocupe el puesto que ocupa en al UCR.

En conclusión, Nos parece inadmisible que alguien con estos antecedentes tenga significativas cuotas de participación precisamente en el posible (o mejor dicho casi inminente) cierre o privatización de un programa de salud que aún se encuentra en manos de una institución del Estado como lo es la UCR.

 

¡UNIDOS SOMOS MÁS Y MÁS FUERTES!

JUNTA DIRECTIVA CENTRAL SINDEU